La Murcia Desaparecida, volumen 58: palacete en la plaza Puxmarina (plaza Puxmarina, 1).
Situado en el frente norte de la plaza Puxmarín se levantó, hasta finales de los años 70, este edificio señorial de estilo Ecléctico, que podríamos encajar entre finales del siglo XIX y principios del XX. Destacaba su gran arco de entrada, y la balconera central de su fachada, que se introducía en el callejón Organistas.
La plaza Puxmarina toma el nombre de la importante familia Puigmarín, quienes levantaron su palacete en la fachada oeste de esta plaza, lindando con la trasera calle Polo de Medina. De todo aquel esplendor urbano únicamente queda en pie el palacete de los Aguado, esquina con la calle Madre de Dios, con su ya característico color rojo intenso. Los Puxmarín fueron señores de La Raya, y llevaron a cabo diversas empresas en pro del patrimonio murciano. La acequia de la Puxmarina, que naciendo de la Mayor Alquibla recorre las pedanías de La Raya y Rincón de Seca, también les recuerda con su topónimo.
El resto de la plaza fue cayendo poco a poco en manos de la especulación del último Desarrollismo, hasta llenarse de anodinas edificaciones de ladrillo visto. De todas ellas, la más horrible es el parking que sustituyó al palacete de la imagen, inaugurado a principios de los años 80, como el más vil signo del destrozo patrimonial del casco histórico murciano. Qué pena.