Catedral de Santa María, volumen 4: interior de la capilla de Los Vélez (plaza de los Apóstoles, s/n).
Don Juan Chacón, Adelantado Mayor del Reino de Murcia (el representante de la Corona de Castilla en el Reino de Murcia) se casa con Luisa Fajardo, perteneciente a una de las familias nobles de mayor importancia del reino. Juntos engendran a Pedro Fajardo y Chacón, futuro I Marqués de los Vélez (quien ostentará numerosos otros títulos, cargos y distinciones).
Pues bien, don Juan Chacón comienza la obra de su propio enterramiento, y el de su familia, en una de las capillas de la catedral de Santa María a finales del siglo XV, obra que terminará su hijo Pedro, que debido a su título nobiliario, da el nombre a la famosa capilla: de los Vélez.
Estamos ante una deslumbrante obra de arte de primer nivel, en la que se fusiona arquitectura y escultura, reuniéndose los últimos retazos del estilo Gótico, y los primeros atisbos del Renacimiento, que desembocará en el representativo estilo Plateresco del siglo XVI español. Al interior no le falta un perejil, siendo un lugar realmente indescriptible que hay que visitar en persona. Únicamente voy a destacar la espectacular bóveda de nervadura estrellada, una de las icónicas imágenes del principal templo murciano.
Resulta que los Fajardo (que conocemos como los Vélez) necesitaban que su capilla sobresaliera del perímetro y altura del resto de la Catedral, como una forma de demostrar su poderío. Lógicamente, esta decisión creó revuelo. Más tarde, Gil Rodríguez de Junterón hizo lo propio con la suya (aunque de una forma más discreta). Curiosamente, a pesar de que estaba previsto que su enterramiento estuviera situado aquí, finalmente los restos del marqués descansaron en la iglesia de la Magdalena, en la localidad de Vélez-Blanco (Almería).
¡Qué capilla tan magna e inmensurable! ¡Qué interior tan magnífico e inspirador!